domingo, 24 de febrero de 2013

Al pairo.


Al pairo.  


       Una clepsidra calando el tiempo gota a gota. Un sicomoro lezamiano bajo el cual sentarse a leer una carta. Clepsidra o sicomoro; no es la imagen inscrita al objeto ni su contexto lo que realza la sentencia. La poiesis, su alumbramiento, está en la cobertura oral, en el tamiz auditivo que recubre la secuencia de signos, en los pliegues silábicos que como un hule revestido de cera formarán las palabras. Y vuelvo atrás, a ese vapor en slow motion que me permite caldear en el éter cada vocablo: C-l-e-p-s-i-d-r-a, s-i-c-o-m-o-r-o. (De mi libro “Cuerpos de racha”)

domingo, 17 de febrero de 2013

Rebelión en La Comarca y un bolero que te salve la vida.


 
Rebelión en La Comarca y un bolero que te salve la vida. 
         Un escritor con nombre de bolerista acaba de rechazar un premio literario que concede el suplemento cultural Áncora, del diario La Nación, el de más peso en la comarca. La causa, según él: “…irreconciliable divergencia política e ideológica con la línea editorial de ese diario, a la que considero falaz y tendencioso en el tratamiento y cobertura de la información nacional e internacional, incluida la del ámbito cultural y artístico”. Cuestión de criterios, pero además, el premio no incluye cheque. El leitmotiv de la perreta no se vincula con las pistas que aporta la clásica sentencia yanqui, la incontrastable fallow the money, porque aquí de money no hay un cinco. Por tanto, la gallardía es dudosa y nada cuesta hacerse el tipo duro. ¡Ayy, ya quisiera verlo envuelto en el mierdero periodístico cubano para que aprenda lo que es falacia y manipulación descaradas de la información! Y ya quisiera verlo atreverse a tanto allá. Porque si allá viviera, a no dudarlo, lo que aquí piensa allí no lo pensaría, y lo que aquí dice y hace, en Cuba huevos para hacerlo no tendría. Ahora mismo, en la antilla más grande, el escritor Ángel Santiesteban (y del que ya desearía este, aunque fuera de lejos, salpicarse con algo de sus creativos sudores) se pudre en una cárcel apenas por protestar contra ese régimen que teóricamente también se opone a las doctrinas neoliberales y con el que, deduzco sin mucho análisis, tantísimas simpatías debe tener este Fernando Contreras que comer frutas no sé, pero boleros no creo que cante. Según aquel que hereje cree ser:Mi libro Fragmentos de la tierra prometida es una sincera y apasionada denuncia del daño que las políticas neoliberales, defendidas explícitamente por ese periódico, le han causado a nuestra sociedad y, particularmente, a los sectores más vulnerables de ésta” Primero, según edición 2012 de la Real Academia Española de la lengua, ese “ésta” ya tilde no lleva, y segundo, sería bueno que en ara de desmontarle ese adoctrinamiento que lo enceguece, La Nación publicara sin dilaciones la carta d su ahora público contrincante. En un país democrático, y este es el caso, un premio literario, venga de la institución que venga, no es otra cosa que un reconocimiento a la calidad de una labor creativa. Eso parecer no saberlo él. No estamos hablando de un premio que concedió un rotativo de Corea del Norte. Hace unos años de este señor leí un buen borrador de lo que pudo haber sido, quizá, con un poco más de paciencia, una buena novela: “Única mirando al mar”, y hasta ahí las clases. ¿Se atrevería este utópico Tomas Moro de los tiempo que corren a rechazar los 150 000 toletes verdes que ofrece Alfaguara en su premio anual de novela o los tantísimos de Seix-Barral, por divergencias ideológicas con los directivos de la primera y herederos de Carlos Barral en el segundo caso? ¿Se atrevería a rechazar los 125 000 euros del Premio Cervantes o el ¡one million dollar baby! del Nobel por similares causas, y además, por haberse atrevido aquellos, por ejemplo y para no ir muy lejos, a otorgarle semejantes reconocimientos a Mario Vargas Llosa, neoliberal consuetudinario? En ocasiones se impone pensar las cosas más de una vez antes de tomar decisiones. La arrogancia ondeará siempre donde el viento no sea lo suficientemente fuerte como para tumbar un asta. La valentía no se vale cuando se muestra la pechuga ante rival famélico, intrascendente. No por gusto se llama como se llama el hombre: hay algo de bolero en todo esto.

martes, 12 de febrero de 2013

Tico viejo


 
Tico viejo.
       Tengo un amigo viejo – que no es lo mismo que un viejo amigo – por acá, que en sus años de juventud vivió en Cuba, músico fue y será, y eventualmente tocó con varias orquestas cubanas de calibre magnum entre los años 40 y 50 del siglo que en la cuneta dejamos década y tanto hará. De la Riverside a Los Muñequitos de Matanzas,  de Chapotín y sus estrellas al Conjunto Casino. Compañero de correrías de Tito Gómez, bohemio irreconciliable, mantiene a los 88 años una lucidez que rebasa los resplandores y el chisporroteo que en la Pan-American Exposition de Buffalo, EE.UU (1901) soltó la Torre de Electricidad. Ya quisiera el Tutankamón con la cara llena de hilachas y vestido de pelotero que en la isla tenemos, conservar un cuarto - o un baño - de la lucidez que tiene mi amigo viejo. Conversador inteligente, mejor lector, dejó Cuba en 1958 después de haber vivido 14 años en ella y hoy me ha dicho que no quiere morir sin volver a verla y que pronto volverá. Así, como si hablara de una novia, una mujer que se ama a contracorriente, imposible de evadir humanamente. Me sorprendió su vehemente, irreprimible deseo de rebobinar y cuanto antes; y temo por él: no es lo mismo ver a una vieja con coloretes que a una doncella en los huesos. Y es que Cuba es algo así como una hembra de lujo, una mujer hermosa que tísica quedó cuando vivía sus mejores años. Mi amigo viejo lo presiente pero a sus almanaques quizá no alcancé con eso para sobrevivir a un leñazo de magnitudes ciclópeas, encontradas y entrecortadas (como la leche) emociones.  De todas formas le deseé suerte, espero que el corazón, por mucho que allá se le arrugue, le aguante. Quiero verlo de vuelta.

 

domingo, 10 de febrero de 2013

Siete Habanas en dos horas.


 
Siete Habanas en dos horas.
       Hermoso este medio soundtrack de la película 7 días en La Habana. La vi esta madrugada: un refresquito. Imagino una película fabricada – como el antojo del capítulo final –  a la carrera, porque con ese elenco detrás y delante de cámaras, las apuestas sobre la mesa daban para más. Al final me queda la impresión de que esa gente fue a Cuba “a joder la pita” y  pasar el buen rato con un pretexto fílmico. Me gustó la presencia de Emir Kusturica, ¿Te acuerdas de Dolly Bell?, su bis actoral y la historia que le tocó llevar porque la asocio con el motivo primario de todos los que involucrados en la película estuvieron: el tropical vaciloncesto. Me gustó además el desenfado constante que transpira ese capítulo, en una Cuba donde los límites, las fronteras sociales son tan porosas que se desploman sin alboroto. Entre la gente de la ínsula que hizo lo suyo en el plató, me quedo con Mirta Ibarra, grande siempre. El tema que les cuelgo, creo, es de Descemer Bueno, pero bueno, nunca se sabe. Lo que sí sé es que me traen con la nostalgia al lomo los todavía próximos recuerdos de ese pedazo casi humano del malecón habanero y  esos 24 instantes de una primavera eterna que te hará renacer…lejos de mí.

!Ay que yo no haría!


 
!Ay que yo no haría!
       2008 fue el año del estreno de "Corazón del tiempo", película de Alberto Cortés (Ciudad de ciegos) sobre el conflicto zapatista. En Sundance no pasaron por alto el filme. La ranchera "Ay que yo no haría!" se roba el show del soundtrack: segundas partes no siempre fueron malas. Los cubanos Descemer Bueno y Kelvis Ochoa hacen buen tándem interpretándola pero me gusta más en la voz de Cecilia Toussaint y, a qué negarlo, esto es opio sin malezas para mi oído.

viernes, 8 de febrero de 2013

Para Don Jóse: mi último adiós.


Para Don Jóse: mi último adiós.
     
      Un par de días antes de irme a Cuba conversé con “Don Jóse”, Director, dueño del Cole donde trabajo, pero además: hombre, amigo. Hablamos de todo un poco, nos deseamos un feliz año. Un par de días después de mi regreso me entero de que ha muerto, un infarto masivo lo doblegó. 50 años, toda la vida por delante. La muerte es asunto vital, y asunto violento –aunque pacífica llegue – cuando quien muere es alguien, digamos, cercano. Y consuelo tendrá, si es que dolor siente por el que ha partido, aquel que en vidas no terrenales crea. Para mí, después de este no hay más pueblo, por tanto: consuelo nunca habrá. Parafraseando a Benedetti (mal poeta, buen ejemplo para lo que quiero decir) me gusta la gente que vibra. Don Jóse era de esos. Tuve la suerte de conocerlo y aunque no pueda escucharme, no puedo dejar que se marche sin despedirlo: hasta siempre Don Jóse, hombre, amigo.

jueves, 7 de febrero de 2013

Antípodas.


Antípodas.
       El Adagio para cuerdas de Samuel Barber clasifica entre las piezas más tristes de la música clásica. Fue el tema que acompañó, en 1945, el anuncio radial del fallecimiento de Franklin D. Roosevelt. Y es el trasfondo en tono de gemido que se impregna usualmente a las imágenes de los atentados terroristas del 9/11. Sobrecoge tanta amargura, pero también conmueve por la impecable factura de estilete sonoro y es que, deduzco, era esa justamente la intención de Barber: herirnos. En las antípodas del Adagio para cuerdas de S.B; sonríe el 4to acto de la Obertura Guillermo Tell de Gioachino Rossini, última de sus Óperas. Un canto a la desmesura, una avalancha del frenesí, un ordenado  desconcierto sonoro que dispara los deseos de lanzarnos en estampida hacía cualquier lugar porque en ese último paso de la Obertura lo que cuenta es el impulso, las ganas, porque el propósito no es otro que multiplicar los motivos por los que vivir. El llanero solitario no me dejará mentir.
 
 
 
 
 

domingo, 3 de febrero de 2013

Enero 2013 en Cuba.


Enero 2013 en Cuba.
        Tomando – además de fotos-cerveza-whisky-mujeres ajenas-sombra en los portales-caminos y veredas – en cuenta que a pesar de haber dormido 29 noches de enero 2013 en Cuba, se me hace difícil concretar resumen noticioso del primer mes del año allí, decido aplicarme al formato oficial cubiche y paso la palabra y los 3 escalones del podio informativo patrio al NTV (Noticiero Nacional de Televisión). Por tanto, he aquí las noticias medallistas del difunto enero, repito, en Cuba. Según me dijo un isleño, la culpa de todo – es decir, la fuente oficial – la tiene la AIN: Agencia de Información Nacional. Así es que a mí de nada se me inculpe porque yo estuve allá solo para compartir un poco de vida con mis padres, familia, amigos, y para rendir honores a todos los “tomando” que discurren entre “además de” y “en cuenta”.
3er lugar (medalla de bronce): Se cambiaron los aislantes de las líneas de alta tensión en el tramo Manzanillo-Bayamo, Provincia Granma.
2do lugar (medalla de plata): Se incrementó la producción cafetalera en Cayo Romano, islote cercano a la costa norte de la provincia Camagüey. 
1er lugar (medalla de oro): En Mariel (¿Provincia Artemisa?, ¿Mayabeque?) se reparó una grúa que no funcionaba desde el periodo de entreguerras…púnicas.