jueves, 17 de diciembre de 2009



Hoy terminó en Costa Rica, oficial y definitivamente, este curso escolar. Hasta febrero no vuelvo a entrar a un aula. “De ampanga” han sido estás últimas 4 semanas de aplicación de exámenes y calificaciones. En algunos casos las respuestas de los estudiantes rebasaron los límites del disparate trivial y alcanzaron la notabilísima categoría de aportes. Fin de curso y comienzo de la temporada hippie son para mi una misma cosa: destierro el “empaque” y desentierro los puros y las latas de cerveza a la velocidad de un pestañazo, desparramo los pies sobre las sandalias y acomodo en mi pensamiento las mejores opciones para el relajamiento. Costa Rica en la palma de la mano y el Colle apenas un vistazo en el espejo retrovisor...hasta febrero. Tertulia, humareda y las greñas de la cara sueltas y batiendo el viento. Quien me ve no me conoce, ni falta que hace,. De cualquier manera, este de ahora es el verdadero yo.