La verdad tal cual es.
Solo a través de un profundo y meticuloso ejercicio de espionaje concertado entre varios agentes que trabajaron bajo el mando de un servidor, se ha logrado establecer la vinculación entre acontecimientos recientes, aparentemente inconexos para el ojo público. El destronamiento e incineración de los ex-líderes tribales carlos lage y felipe pérez en-roque – ahora liliputienses y por tanto con nombres en minúsculas – fue el inicio de un complot macabramente cavilado por el Zar de la Coca Cola Zero prohibida, Hugo Chaveta, en contubernio con los lideres históricos del Club Geriátrico de La Habana, que condujo meses después al linchamiento de Rey del Pop… Corn, Michael Jackson, y a la salida de sus aposentos presidenciales, en ropa interior y con rumbo a tierras que me acogen, del Presidente de la República Bananera y Marera de Honduras, El Don Apacible Manuel Zelaya. carlos ¿lagerloff? y felipe el ajedrecista de 2da categoría, se estaban dando un soberano atracón con las mieles del poder, sentados cómodamente a la sombra de los panales de Palacio, sin recibir una mísera picadura de abeja, porque el Apicultor en Jefe se había encargado, concienzudamente, de acapararlas todas en su legendario cuerpo a lo largo de 80 años. Cabe añadir como dato que nos desvía, aún más, del eje central de la trama, que el sufrimiento provocado por dichas picaduras, dejó de martirizar hace 50 años la piel del Non Plus Ultra, para comenzar a lacerar, de manera inclemente, el pellejo del pueblo cubano... Bueno, a lo que vinimos ¡!: se reanuda la carrera en el circuito de Indianápolis ¡!...Jimmy Jonhson toma la punta de la competencia cuando faltan apenas 20 vueltas para completar las 500 millas…No, creo que por aquí tampoco era la cosa… Ya ¡!...Michael Jackson entró en el estrecho y amplio círculo que define los bordes de la mirilla telescópica que utilizan los francotiradores de La Habana – y ahora también de Caracas, Quito, La Paz, Managua – para eliminar rivales, desde que hace ya casi 30 años se le ocurriera la infeliz idea de ejecutar en vivo, en pleno concierto, aquel pasillo tremendo que el mundo entero conocería a partir de ese momento como “paseo lunar”. A ojos vista, aquel pasillo parecía desafiar las leyes de la Física y la Óptica, por lo que cuestionaba abiertamente los preceptos del Materialismo Dialéctico y socavaba los principios del Marxismo Leninismo; y quien se atreviera a cometer semejante ultraje a la moral revolucionaria no podía morir de viejo. Según reporte de los ex agentes del G2, la KGB, el Comité contra el uso del jabón Nacar, el Mosad, y el Comité de Protección del varano de la isla de Komodo, “El Maike” tenia sus días contados desde aquel instante. La aparente picadura de mosquito hambriento que aparece en el reporte forense de El Maike, no es otra cosa que un micro dardo envenenado con curare y he ahí la causa del deceso del Rey de los Pederastas, también conocido como Rey del Pop… Corn. La cerbatana asesina fue comprada con dinero proveniente de las asquerosas ventas de petróleo venezolano al cacique de una tribu peruana radicada en las inmediaciones del nacimiento del Rio Amazonas. El indio se bajó con una cifra de espanto, pero de todos modos se realizó a transacción. El autor del crimen, del magnicidio, fue pérez roque, el ajedrecista del montón y ya expliqué lo de las minúsculas, quien urgido de recuperar sus bonos de gasolina para mover el cigüeñal desu auto marca Lada, se vio forzado a realizar lo que en el entorno castrista se ha dado en llamar “la hazaña sin saña”. El Don Apacible Manuel Zelaya salió a escena justo en el momento planificado y de la forma prevista, en piyamas, para desviar la atención de los medios informativos. Corren rumores mediáticos según los cuales el tamañazo del presidente Zelaya es inversamente proporcional a las dimensiones de la bolsa que guarda sus genitales. Los agentes bajo mi mando no logran definir aún si estos rumores son parte de la cofradía o de la realidad. Se me queda un cabo suelto, carlos lage, y un cabo encendido en el cenicero pero que importa, a García Márquez se le quedaron – según él – como 50 cabos sueltos, más de 2 cajas de cigarros, en 100 años de soledad, y nadie se ha quejado por eso.