Domingo 7 de marzo – martes 8 de junio.
He vivido al margen de la pleamar y de la marea, ajeno a la vorágine vital, informativa, productiva, de espaldas a casi todo. Ofrecí lo que de humanidad poseo como refugio feraz donde cobijar la abulia, la esterilidad y el abandono. Llegué a ser una cápsula humana, un cascarón vacio, un ente. Dilapidé horas y días que no volverán, me recluí en la nada y el desaliento. No fui feliz. Me adormecí sobre cualquier rutina. Escribí poco, pensé poco, comí poco, bebí poco. Promoví conversaciones superfluas, bizantinas, cantinflescas. No vi el mar, estrujé recuerdos y vivencias. Me pelé y afeité, practiqué el mimetismo. No seguí de largo, no soñé, no tuve fe, no me atreví. No cambié de acera, no me lo reproché. Envejecí. De nada me arrepiento. Aquí estoy otra vez.
P.D: En la parte inferior derecha de la foto, el rostro feliz de mi hija.
SEAS BIENVENIDO AHORA Y SIEMPRE, COMPAÑERO!
ResponderEliminarUN FUERTE ABRAZO! TE ESPERAMOS!
PD: QUÉ TAL ESA NOVELA?
Abrazo d vuelta...la novela avanza, a paso lento, pero avanza..
ResponderEliminarAquí estoy..
una linea recta sin accidentes ,al menos poco notorios para ser mencionados ,no hay tiempo de cruzar aceras es el momento de las alas para retomar el vuelo .Disfruta el viaje y deja que los que te lean tambien lo disfruten.
ResponderEliminartengo mucha alegria por el regreso...a montarse en la rueda de la vida miche,no hay de otra..bechitos miles.
ResponderEliminarCoño, viejo, yo que ando con el alma medio jodía, leer el resumen de tus últimos tiempos casi me destroza. Pero que bueno que estes de vuelta. Bienvenido. Welcome back.
ResponderEliminarGracias a todos x los coments...
ResponderEliminarUn saludo múltiple..